Compatibilidad de Tauro y Acuario

La lógica planetaria parece negarles a estos amantes la posibilidad de ser felices a largo plazo. No obstante, toda pareja que se ame mutuamente puede desafiar al zodiaco. Descubre lo mejor y lo peor de esta unión.

Aspectos positivos.

Honestidad: si bien ambos abordan la sinceridad desde formas muy diferentes de manifestarla, lo bueno es que estarán de acuerdo en que no se debe mentir, pase lo que pase. Una amistad entre estos dos signos sería realmente duradera, ya que cuidarían mucho el uno al otro al decirse siempre la verdad. Tauro será más sutil y diplomático, mientras que Acuario podrá llegar a ser hiriente de tan directo.

Sensualidad: ni bien el aguador se entregue a los brazos de Tauro, sentirá despertar su erotismo y pasión. Por su parte, el toro se sentirá orgulloso y con la autoestima por el cielo cuando note que puede enseñarle algo a uno de los eruditos del zodiaco. Tauro se sentirá el dios del sexo y eso lo llevará a explorar mucho más allá de lo que sabe hasta ahora.

Suavizar asperezas: cuando la diplomacia del toro entra en contacto con las formas un tanto primitivas de Acuario, este último se sentirá un poco fuera de lugar y tendrá la necesidad de hacer que su tono de voz sea más sutil y que sus deseos suenen como tal, y no como órdenes.

Aspectos negativos.

Incertidumbre: será muy difícil para Tauro no saber cómo reaccionará Acuario. El toro necesita tener todo bajo control, no solo a su pareja, sino también a toda la realidad que lo rodea.

Susceptibilidad: ¿qué hará Acuario cuando Tauro saque a la luz toda esa sensibilidad acumulada? Nunca se sabe... pero si está lo suficientemente enamorado, hasta puede sorprendernos con un abrazo contenedor. Sin embargo, el toro debe tener cuidado de no manifestar este sentimiento demasiado seguido, por si acaso... para no aburrir.

Irresponsabilidad: las actitudes que llevan a Acuario a vivir la vida locamente, no serán bien vistas por los severos ojos de Tauro. Habrá problemas por la irresponsabilidad del aguador, quien puede terminar por tomar su cántaro e irse muy lejos de quien tanto lo condena.